I'm so so so sorry!

  

¡Hola bichitos y princesas!

Lo primero de todo ¡¡LO SIENTO!! Siento horrores haber tenido esto tan colgado y solitario, pero es que solo tenía mi pequeña Blacky para mantenerme conectada al mundo y no tiene app de blogger (Que la he buscado, lo prometo) Así que es debido a eso mi abandono temporal, le quito el polvo y las telerañas, al menos por ahora. Empiezo segundo de Bachiller, muy bonito y precioso (Notese mi ironía) lo cual conlleva más trabajo, muchísimo más estudio y esfuerzo y muchas horas invertidas en estudio y trabajo, pero tengo que sacar tiempo para disfrutar y desconectar del agobio de la preciosa Selectividad que tanto nos persigue. Así que me tendréis dando guerra, lo siento, aunque menos de lo que me gustaría, enhorabuena a vosotros que me leéis.

¡Mucho amor!

Bienvenidos a la era de la pérdida de la inocencia.

 

Bienvenidos a la era de la pérdida de la inocencia, donde cada vez menos niñas juegan con muñecas y los niños..bueno, al menos ellos siguen jugando al fútbol, pero la mayoría porque papá quiere un hijo futbolista que le "quite de pobre". Las niñas ya no juegan con muñecas, miento, las pequeñas al menos sí.

Pero.. ¿Las de diez? Porque yo recuerdo que a mis tiernos 10 años todavía jugaba con muñecas y a mamás y papás, y a nadie le parecía raro, ahora...bueno ahora a los 10 años las niñas tienen más novios que los que he tenido yo en mis 16 años, casi 17. Ya no sueñan con cuentos de hadas, con príncipes y princesas, sino con "malotes" de tres al cuarto de gimnasio, faltos de cerebro pero lleno de músculos, y ellos, con que tengan el pecho más grande que el cerebro, les basta.

Y esto es lo que tenemos, bienvenidos a la era de la pérdida de la inocencia, donde ya nadie desayuna con diamantes y nadie vive romances inolvidables.